¿Amnesia colectiva o desconocimiento general?



Esta semana se ha producido, por fin , el ansiado cambio de gobierno. Entre los cambios sustanciales destacan la desaparición del Ministerio de Vivienda, el Ministerio de Igualdad y el nombramiento de Pérez Rubalcaba como vicepresidente primero del Gobierno y funciones de portavoz. Así, Rubalcaba se ha convertido en el hombre más poderosos del país, al controlar tanto el gobierno como la policía. Esto recuerda a los "grandes momentos" de la Rusia comunista.
Sin embargo, quizás deberíamos remontarnos a los últimos años del "felipismo" para conocer el contexto en el que Rubalcaba estuvo de ministro.  El "felipismo" es el periodo comprendido entre 1982 y 1996, años en los que estuvo el socialista Felipe González como presidente del Gobierno. A partir de los 90 fueron conocidos casos de corrupción como Filesa, Malesa y Time-Export y los Gal, en los que algunos actores del gobierno de la nación estaban especialmente implicados. 
Hasta aquí, la historia. Sin embargo, deberíamos reflexionar sobre los dirigentes de nuestro tiempo. Es triste que la sociedad pase por alto todos estos hechos y sigamos gobernados por gente cuya carrera política está cimentada sobre oscuros episodios. 
Pero todo esto es de dominio público y apenas queremos recordarlo o pensarlo. Mientras tengamos un bienestar y una vida más o menos organizada y sin problemas, somos felices. Por eso España aguanta todo, porque somos una sociedad adormilada. Algunos critican a gente como Fidel Castor, Mussolini, el Che Guevara, Franco  o los jóvenes del 68. Pero en esta mezcolanza podemos encontrar un espíritu común: el espíritu de cambio y de luchar por unos ideales. Quizás sus intervenciones fueron más o menos acertadas; quizás su final fue desgraciado o sus proyectos se les fueron de las manos. Pero desde luego se movieron. Todos son polémicos, todos son odiados por unos y queridos por otros...pero, ¿y nosotros? ¿a qué contemporáneos queremos y a cuáles odiamos? ¿a quién seguimos? ¿por qué? Sólo la reflexión y el análisis nos llevará a conocer la realidad de las personas y de los tiempos.

Vivir para siempre

El próximo 29 de Octubre se estrena en cines la película Vivir para siempre, del cineasta español Gustavo Ron (“Mia Sarah”).

La película narra la historia de Sam, un niño de doce años al que le encanta recopilar historias y sucesos fantásticos. También le gustaría saber que se siente al tomarse el primer trago de cerveza, al dar la primera calada a un cigarrillo a escondidas... al besar a una chica. Sam quiere saber cómo se sienten los adolescentes porque él no llegará a serlo: tiene leucemia. Aunque los adultos sólo le responden con ambigüedades, él quiere conocer todos los datos y detalles sobre su muerte. Está dispuesto a averiguar las respuestas a todas sus preguntas y por eso decide escribir un libro. No sólo eso, decide cumplir los sueños que tenía pendientes.

Es un largometraje que trata un tema difícil de una manera que nos invita a soñar, que deja una esperanza; una película que tendrá una sonrisa por cada lágrima.


Blood Money

La semana pasada se estrenó en algunos cines españoles el documental “Blood Money. El valor de una vida” sobre la verdad del negocio del aborto. Este documental americano destapa el gran entramado empresarial que hay detrás del aborto y desvela la verdadera intención que esconde la aparente “preocupación” por facilitar la interrupción del embarazo. Intención nada relacionada con la salud de las adolescentes.

A la vez, la Ministra de Cultura califica esta película para mayores de 18 años ¿Por qué? Si las niñas de 14 son en España público objetivo del negocio del aborto, si cada día se les ofrece con más facilidad someterse a un aborto y tienen capacidad para decidir sobre él, ¿qué más da que vean un documental y se informen? La única razón que se me ocurre es que hay algo que no se les cuenta a estas niñas y que se quiere ocultar. El aborto es matar una vida y deja secuelas para siempre en las mujeres que se someten a uno.

María González Zabal





El viejo más joven del mundo


El otro día, alguien me dijo algo hermoso cuando yo le pregunté ¿El Papa es joven? Dijo: "Si el joven es alguien que tiene mucho futuro y poco pasado sí. Si es un problema físico no". Entonces pensé, verdaderamente hay pocas personas que a sus 83 años sigan viviendo como si les quedara toda la vida por delante. Es sorprendente que una persona de esa edad cargue sobre sí el peso de la Iglesia y el duro papel de sucesor de Pedro en un mundo relativista y descreído como el nuestro. Más sorprendente aun que mantenga esa vitalidad intelectual que le ha conducido a través de su vida junto a un profundo amor por la verdad y la humanidad. Que sea al mismo tiempo un hombre firme y cariñoso, tremendamente realista y rebosante de esperanza. Los que lo conocen hablan de él como un hombre tímido que por su condición de Papa ha quedado expuesto a todas las miradas, un hombre sencillo y un valiente hombre de paz.

Esta persona con quien hablaba, continuó diciendo: "El Papa es una persona que con ochenta años está actuando como si fuera a vivir otros cien. Lees lo que dice, lo que hace...no tiene prisa. Esto tiene que ver con que la Iglesia necesariamente es joven porque como tiene la certeza de que no se va a terminar, nunca tiene prisa. El Papa es consciente de que es cabeza y sabe que está construyendo para siglos, no para sus años de pontificado. En ese sentido es joven. El Papa sueña y sueña bastante. Si una persona que no tiene planes es vieja, entonces el Papa no es un viejo."

Como consecuencia de estas palabras he pensado en recomendaros a los jóvenes del +68 que nunca dejéis ser lo que sois ahora, gente que sueña, gente con proyectos, gente audaz. Que os arriesguéis ahora que no tenéis mucho que perder y siempre.

Creatividad científica


Llevo un mes de clases estudiando qué es la ciencia y de qué manera funciona el método científico. La pregunta de fondo es si la ciencia está basada en la pura experimentación o hay lugar para la creatividad y, ese caso, ¿qué es la creatividad? No entraré a examinar ninguno de estos temas, ni hasta dónde puede llegar la experimentación, pero creo que este anuncio de Audi A4 resume muy bien como ambas facetas no están necesariamente reñidas y como la ciencia puede crear cosas bellas. Parece que en la ciencia no está todo tan claro, quizá haya que pensar un poco estos temas.

Ser uno mismo

Oímos y leemos esta expresión varias veces al día. En las bocas de las personas, en los medios, en las clases...

¿Sabemos lo que significa?

Me gustaría hacer una pequeña reflexión a partir de un grupo en Facebook que vi el otro día. Se llamaba "Si haces lo que debes, serás correcto. Si haces lo que quieres, serás feliz".

Peligro peligro, pensé. No sé por qué pero intuyo que el hecho de que la gente que piense que si hace lo que "quiere" será feliz, es la causa de todos los males de la humanidad.

¿Pero menudo rollo no? Si hacer lo que queremos es malo... No hombre, yo lo que creo es que lo que queremos es algo que o bien no sabemos, o confundimos en varios niveles.

Está por un lado lo que queremos por que nos apetece, y por otro lado lo que queremos profundamente, aspiraciones en la vida, algo que nos llena de verdad ¿no? Ojo porque muchas veces (de hecho la mayoría de ellas), se contradicen las decisiones que hay que tomar para cada una.

Ejemplo de niños chicos! Tenemos muchísima hambre, sacamos el bocadillo que nos hemos preparado... y a la derecha, nuestro amigo no tiene nada (bueno sí, hambre). "Se tú mismo, haz lo que quieras" Aquí es donde el ser humano decide. Aquí está muchas veces, en ésta decisión, el que una acción sea buena o mala. Por eso NO PODEMOS! decir sin más "haz lo que quieras". Nos estamos arriesgando mucho ahí. Queremos comernos el bocadillo entero, pero lo que más queremos en esta vida es ser felices y sabemos que nos va a llenar más una acción generosa.

Si seguimos por ahí podemos ver que si "debemos" hacer algo es porque ese algo es BUENO, y por tanto nos hará más felices... que es justo lo que queremos todos!

Me parece entonces que queda bastante clara la respuesta a las personas que dicen "yo no me dejo llevar por normas morales, yo soy yo mismo". La gente que procura obedecer, es la que procura al mismo tiempo ser ella misma, no hay nada que sea más nuestro que la búsqueda de la felicidad. Nada.

Sé tú mismo, déjate controlar por el bien!

La indefinición del concepto moda


Pensar en la moda me marea. Cada vez entiendo menos lo que este concepto significa. Se ha extendido tanto en tantas direcciones que ya no lo comprendo. Lo que en su inicio fue concreto se ha convertido en abstracto . O tiene un montón de significados o no se conoce su límite. Cada uno lo entiende como quiere o como puede y en realidad, no sé si alguien sabe lo que es, lo que puede inducirnos a pensar que todo es moda. No creo que sea así, pero es verdad que vivimos en una época de masificación de gustos, preferencias, ideologías y formas de actuar. Por ejemplo ¿existe la política? ¿Hay ideología o hay personas que gestionan bien su imagen y que prometen hacer lo que está de moda pensar? Ecologismo, sostenibilidad etc.

La sociedad de consumo, el imperio del "usar y tirar" también están dentro del "sistema moda". Compramos, usamos, tiramos. Compramos lo que queremos tener y está bien tener pero ¿tenemos por nosotros o por los otros? Está bien tener por los otros. Está bien expresarse y comunicarse. Pero ¿hasta qué punto? ¡Orden!

Dentro de lo que propiamente entendemos como moda las cosas han cambiado. Ya no son las marcas las que establecen tendencias. Florecen los blogs en la red y de pronto, una niña de 12 años llamada Tavi se sienta en primera fila en los desfiles y mueve su cabecita aprobando y desaprobando lo que finalmente llegará a mi armario. Entonces pienso en lo poco que me importa la moda. El otro día pensé en crear la moda de ir contra la moda. ¿Es eso posible? No. No, porque no tendría el respaldo del mercado. Es un imposible.

Creo que con el arte ha pasado algo parecido a lo ocurrido con la moda. Cada uno entiende lo que le parece, todo vale. Moda y arte están relacionados. ¿Es arte la moda? ¿Es moda el arte? Mira, no sé.

A pesar de todo esto que digo, me siento muy atraída por la moda. Me parece necesaria. Me gusta cuando las personas tienen un estilo propio. Me gusta el reflejo de lo que las personas son en su aparecer. Me gusta The Sartorialist y cuando las personas no se visten para aparecer en ese blog. Me gustan las personas.